Oda al Ego: La boda

Con unos pocos días de retraso (...pero que queréis? es época de exámenes) me toca hablar de la boda a la que fuimos el otro día. Al final tanto Dunia como yo optamos por la decisión más de fiesta de cada uno. Paso a recogerme y llegamos más o menos pronto a la Iglesia Ortodoxa Apostoli Petru y Pavel y esperamos a que llegara la novia. Cuando al fin llegaron los novios y se dieron cuenta que se habían dejado los anillos y el ramo en casa se tuvo que esperar otra media hora, que la novia muy sabiamente aprovecho para relajarse.
Y empezó la ceremonia, muy bonita, aunque no entendí nada. Y tras hora y media salíamos de allí en busca del restaurante y nos perdimos por el camino. Llegamos al restaurante: dos horas y media casi con la comida. Así que Dunia con prisas, que tenia que irse para Oviedo.

Un día largo y completo. La novia muy guapa. La boda muy bonita. Y Dunia no cogió el ramo, se lo llevo su ahijada (para disgusto de la madre).